El nombre propio es la propia receta sagrada para lograr la culminación de nuestra misión aquí en esta vida terrenal,
...
recogida entre las estrellas antes de nacer.
Así mis iniciales sintetizan mi esencia, las vocales mis cualidades anímicas, mis consonantes la forma que busco darle a todo lo que hago, la rítmica de mi nombre la dinámica de cómo lo haré.
Descubrir lo que mi nombre trae es realmente el mejor regalo que podemos darnos para conocernos, aceptarnos y amarnos a nosotros mismos.
Dios guardó un tesoro sonoro para cada uno de sus hijos… ¿Cuál te regaló a ti?
María Sol Tollmar
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